soloJazz

Esto queda en la peatonal Bacacay. No vayan.

El lugar está bien puesto, con colores y ambientado en la película de Fellini (muchas fotos).

Por suerte llegué para el postre. Sergio, Carlos y mujeres estaban ahí hace rato. De repente se aproxima a nuestra mesa uno de los mozos.

¡No, otra vez!

Era como la quinta vez que nos traían un plato que no habíamos pedido. Y era como la quinta vez que tenían que recordarles lo que sí habíamos pedido. Y seguían el viaje por el resto de las mesas buscando el destinatario original del plato, que se iba enfriando. Comida viajera, digamos.

Pellizqué algo que quedaba de pizza. Estaba buena, a pesar de los paseos. El flan mal hecho, con agujeritos (existen cretinos que creen que los agujeritos son más ricos y caseros, pero en realidad es porque el flan está mal hecho).

Luego de reiterados pedidos, mucha paciencia, y alguna recorrida por las mesas, llegó un agua que habíamos pedido.

Y… ¿nos puede traer una copa? Para el agua, ¿vio?@ </blockquote>

Tomaron una copa de por ahí cerca, con los dedos enchastrando el interior. Al aproximarse la copa y el flaco a la mesa, se dio cuenta del enchastre, y procedió a limpiar la copa, con su delantal. Puaj.

Mucha paciencia, mucho asquete, y cuando nos vamos, el veterano que está en la caja, que nos despide con cara de " $ c a s h $ ". Al diablo con este lugar.